miércoles, 13 de marzo de 2013

dos&sábados&seguidos


Compañera de celda,
Paisana enajenada.
Tu no me has dicho,
lo que nadie escucha;
porque ensimismados están,
en su propia contienda.

No obstante a mi me ganaste.
La noche donde los hielos se hicieron agua,
donde el carbón hizo guiños a los aún despiertos.
Se entreabrió el calabozo que ahora somos.
Se abrevió el párbado del dragón.

Quiero hacerme invisible dentro tí.
Que nadie me oiga
Ser tu llaga arrinconada;
Esa que paladeas cuando nadie ve,
Cuando más etérea te sientes.

Tu tez blanca,
guarida de tanta oscuridad,
me hace dudar,
de lo que debo, lo que quiero y hago,
de lo que somos tu y yo,
una pesadilla imposible,
un ventarrón de madrugada,
entre barrotes:
Unidos
Aislados
.

Fuiste la primera
con la que me expliqué por gusto
no por pedir perdón.

Tan sólo fuimos una nota al fondo del pasillo, que nadie escuchó, que cimbró nuestras cadenas.

No hay comentarios: