lunes, 31 de julio de 2017

almejas con sueño


Me acuerdo mal de mis imaginaciones adolescentes y no sé si eso tiene que ver con todavía me permito ser creativo o si sólo es que estoy viejo, a la deriva de lo real y náufrago de lo fantasioso.
Soy un volante intacto en una carretera metropolitana.
Soy el fango que encubre a un cocodrilo inmóvil, quizás muerto.
Soy un punto y coma, en una planilla con incalculables puntos y comas.
Soy los ganglios inflamados de un niño sonriente que juega con el hollín.
Soy todo el coraje que fluye por los telegramas que una guerra olvidó re-enviar.
Soy la fecha de caducidad en un contenedor reciclado que ahora contiene sopa de fideo.
Soy el miedo que encarno, que ni a mí me comparto, que llevo tan cerca que ni sé identificar.

No hay comentarios: